Me senté un momento a pensar lo que
recuerdo,
Tengo una amiga Penelope y orfebre,
Tengo una sobrina prestada rubia y feliz,
Tengo una caja de flores que no he
recibido
Tengo un tango posdatado de cuando fui
feliz
Tengo este tiempo de naranja y menta,
De cosas colgadas con los ganchos de la incertidumbre
De haber llorado las esquinas hasta mojarme la ropa
Pero cuando todo
fue peor
Me volví a encontrar, y pude usar mis
ojos de espejo
Reír del propio ruido de mis silencios.
Porque cuando todo estuvo peor me senté a
recordar
La risa de la tarde entre la hierba,
La gaita sudada como lengua que mi pueblo
habla,
Las esquinas de mi calle antes de tanta
mierda,
Los olores de los mercados donde abundan
las especies,
La cosquilla de mi cuello cuando con la
noche cae la falda,
Las ganas de hacer que tuve
Hasta que tuve las cosas y perdí las
ganas,
Ese agite de cada jueves, de imprenta y
opinión,
Esa caricia al ego de los comentarios,
Cuando tuve un momento de luz todo perdió
peso
Y quise nombrarte en tus fases desnudas
Cuando al amor te rendiste como las
palomas a la paz
Como la galleta a la leche, como los
españoles a la Independencia
Y quise irme tan ligera que no vi ni las
lluvias volviendo
Ni el calor y sus humaredas,
Cuando la alegría fue,
Yo volví,
Esta línea se onduló
Y finalmente te vi.
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