jueves, 23 de enero de 2014

Sociedad del Privilegio


En la sociedad del privilegio sino existen los derechos tampoco existen los castigos. En tal sentido, tan inútiles son las garantías de los derechos que se consagran en la Constitución como, los Códigos Penales que se erigen la República. Porque entre estos y la vigencia, no median los principios de oportunidad o la comisión del delito, o la disponibilidad presupuestaria que permita avanzar, sino un sistema de relaciones personales de corte feudal.

Pensaba en esto desde la preocupación. Pues la estructura del Estado que, se pretende de Estado democrático y social de Derecho y de Justicia choca con una relación que, en la lógica de las relaciones de vasallos se estructura a través de pactos entre señores feudales con los reyes, y una cadena que va hasta las servidumbres domésticas. Esta sociedad sigue viva en una Venezuela donde la riqueza se hizo bajo el manto de la protección de la dictadura y permaneció sin mayor dificultad en la democracia partidista.

Entonces, esa sociedad tiene una categoría grandísima de delitos blancos. Para afirmarlo me apropió de una clasificación que sobre la corrupción expuso de Arnold Heidenheimer, pues la verdad hay renglones que, estando previstos en la ley son considerados socialmente como  una categoría que va desde lo normal hasta el deber ser.

Con estos delitos blancos me refiero a la existencia, administración, comercialización con monedas distintas a las de curso legal en la República toda vez que existe un control cambiario. Parece, al respecto, que la sociedad ubica que esto no es tan sólo una conducta irrelevante para el derecho penal sino que legítima su existencia y promueve su práctica. Ante esta situación, ruge la afirmada supremacía del Estado que se ve permeada por ese orden pseudo-feudal que arrastramos desde la Colonia, donde tan sólo quien besa la mano tiene derechos y que para ser perdonados, el beso de mano, basta.

Si a escala estructural vemos que en el derecho moderno el beso de mano existe como perdón toda vez que se conserva la figura del indulto, en la realidad venezolana creo que esto es una situación más expandida pues cubre toda una categoría de funcionarios intermedios que juegan al señor feudal.

Dando vueltas con estas ideas caía en su mejor descripción folklórica, la de Alí Primera, “el comisario en la costa manda más que un general” y así vamos descubriendo un tejido de amorfas formas que frenan un proceso de liberación porque existen, en toda la sociedad y en cada quien, como un juego de luces y sombras.

Como sombras, todas las zonas donde no llevamos las luces del Bolívar que proclamaba la moral, y esa contadictoria vocación de “liberar al pueblo a la Miseria y hacernos ricos”, “hacer la Revolución como Rosa de Luxemburgo manteniendo el porte de Miss”…

Como sombras, todos los periodos de nuestra historia que van entre todas nuestras luces y el silencio que hace eco de estas preocupaciones…

lunes, 20 de enero de 2014

Contra la discriminación


A Desalambrar
Contra la discriminación
 Ana Cristina Bracho

Justo arranca el año y la lucha contra la discriminación toca la puerta. Pues el miércoles de esta semana, hubiese cumplido años Martin Luther King, quien supo denunciar que en Estados Unidos la discriminación racial era un sistema de vida. A la vez que el 2014 comienza  en Venezuela con el anuncio en las redes sociales y los medios de comunicación de que será presantado un proyecto de Ley para que se dé –finalmente- el debate para modificar el Código Civil y permitir el matrimonio igualitario.

La discriminación y el racismo son dos conceptos cercanos pero no son lo mismo. El racismo, que es la exclusión del que consideramos étnicamente distinto, sigue siendo usual en todo el planeta y se ha mantenido después de la Colonia, en el rechazo y maltrato de los pueblos originarios. Sin embargo, la discriminación es un concepto más amplio, que equivale a no reconocer en el derecho y en los hechos, a otro u a otra, como igualmente digno.

La dignidad es la cualidad de lo humano y el nudo al que todos los derechos se aferran para que cada quien pueda disponer de un buen vivir. El buen vivir, como concepto integral requiere de condiciones óptimas para la vida privada, la participación política, así como, el bienestar material. Ahora bien, suele discriminarse a aquél o a aquella que se considera distinto y esto está prohibido si ese trato se convierte en limitar el acceso a derechos o a beneficios que a un igual, le corresponderían. Allí la diferencia, puede darse otro trato a quién está en otras condiciones o a quién lo requiere para acceder a un derecho pero no, para limitar un derecho.

En el caso de las personas sexodiversas se encuentran con prohibiciones y limitaciones, tácitas y expresas, que equivalen a que siendo titulares de los mismos deberes, amparados por la clausula general de la igualdad, no tienen en la práctica los mismos derechos.

Pues, la interpretación constitucional hecha desde la tradición jurídica patriarcal venezolana y la existencia de una regulación del matrimonio en lo esencial no modificada desde hace más de un siglo, les impide casarse aunque la Constitución declare como principio fundamental la igualdad entre todos y todas.

Las consecuencias de esto van más allá del aspecto sentimental porque les prohíbe desarrollar la vida en común en sentido pleno, que incluye por ejemplo, la capacidad de beneficiar políticas de habitación o heredar entre ellos, a la muerte de alguno. Esta situación, remanente pesado de un peor derecho exige de ser enmendada y el apoyo debe limitarse a sus beneficiarios sino a todos quienes, a todas quienes, se indignan ante la desigualdad.

Caracas
@anicrisbracho

jueves, 16 de enero de 2014

Opinión: Comparación: de la liquidación de los trabajadores a su protección


 
Hace apenas dos o tres días el Presidente de Francia, Francois Hollande, anunció en rueda de prensa lo que serán las medidas económicas que, visando salvar la producción y la empresa serán aplicadas de inmediato y hasta el año 2017 en Francia. El día de ayer, 15 de enero, en Venezuela, el Presidente de la República, Nicolás Maduro Moro, en el marco del mensaje anual (rendición de cuentas) a la Asamblea Nacional dibujó las medidas que serán tomadas para proteger el país. Es interesante partir por afirmar que puestos uno al lado del otro, ambos demuestran una crisis económica y social profunda que conoce menos de la separación del planeta en dos mundos, pues somos ahora un solo mundo secuestrado a manos de un minúsculo grupo de personas.

Ahora bien, para Francia los anuncios son básicamente: el aumento de los impuestos similares al Impuesto al Valor Agregado (IVA) llamado allá TVA y la flexibilización del empleo. Sobre el tema son dos las afirmaciones centrales del Presidente que hasta ahora se definía como socialista y entonces asumió ser socialdemócrata para ser conocido ahora por la prensa como social-liberal. La primera, es que debe asegurarse un consumo “más racional de los medicamentos” que entra en el contexto en el que desde la gestión Sarkozy la Seguridad Social es cada vez menos integral y menos incluyente; a la vez, que las cotizaciones familiares serán eliminadas antes del 2017. Para soltarlo el Presidente no se ahorró los eufemismos pues explicó que a menor costo, mayor oferta de trabajadores y entonces, mayor empleo.

¿Mayor empleo o peor empleo? Parece que sin duda la segunda. Ante la movilización de los centros productores hacia países donde, se trabaja por menos, la salida de Francia es ahora que allá mismo el trabajo cueste menos. Esto, es difícil leer cuando uno pasa sólo por el modo turista donde, la realidad se ve, como un espejo del mundo central, amplio en infraestructuras y tecnologías, al lado de nuestro precario mundo periférico.

La situación en Venezuela es distinta pero no menos compleja. Hemos de recordar que llegado el petróleo se abandonó una incipiente estructura agropecuaria que nunca fue ni rica ni suficiente, y que, tan sólo se viene recuperando con la Revolución. Desde ese punto de vista, la industria venezolana es pequeña, reducida, tan sólo en manos de pequeños grandes capitales que han sabido más de una vez poner a temblar todo el escenario nacional.

Hace un par de años que la formula de protección, caracterizada por mantener a precios fijos los productos vitales –o casi fijos- es burlada por la Industria que buscando aumentar ganancias presiona al pueblo para que se levante contra la estructura a su favor. Luego, tras haber sufrido grandes salidas de las reservas internacionales por la vía de pasar a dólares todo lo que se produce y jamás reinyectarlo a la economía local, se estructuró para el año 2003 un control de cambio que se demuestra permeado. 

Esta combinación de moneda protegida, precios fijos –ver subsidiados- y hambre de dólares en las clases medias y altas, no como moneda de cambio sino como bien concreto-, ha creado un contrabando que nuestra pequeña y manipuladora empresa no ha soportado.

Pese a este escenario, la apuesta venezolana para el 2014 insiste en mantener la moneda a un nivel que siga permitiendo el acceso de los venezolanos y venezolanas a bienes y jugando por primera vez al control de precios con una estructura de control de costos que es aún muy flexible y abierta, al lado de sus equivalentes extranjeros pero que sigue siendo sin precedentes.

Mi postura al respecto es mirar por encima de la derecha infartada y frente a la izquierda pesimista que hay que pisar el terreno de la realidad y vaya mi saludo a quien, frente a una situación donde abiertamente algunos apuestan a la empresa sobre el hombre, prefiere a los obreros sobre las empresas. También, el reconocimiento a la humanidad de un hombre que sigue resistiendo el bombardeo de propios y extraños, que le reclaman no ser Chávez, no ser, no ser…, ser quien es.

Caracas

miércoles, 15 de enero de 2014

Sin saber


No sé por qué
Tengo la impresión
De que con tus manos cerca
El cielo se aligera.

No sé por qué
Tengo la impresión
De que mi nombre
Con sus dos partes
Con sus dos apellidos
Está incompleto.

No sé por qué
Entre todos
Te escogí
O me dejé escoger.

No sé por qué
Entre todos los besos
Fueron los tuyos.

No sé por qué
En vez de llorar
Por lo que has hecho
Quiero llorar lo que
Nunca hicimos
Nunca haremos
Nunca fuimos.

Simplificación


Si fuese una cama
Habría perdido
Una a una,
Con desgarros,
Las patas.

Si fuese una taza
Desde la base
Hasta la aza
Estaría astillada.

Si fuese tu amor
Nada de esto fuese
Lo que estoy sintiendo
Hoy.